Todos los días nos sentamos en la universidad, la observamos limpia, aseada y resplandeciente; sobretodo en el bloque uno donde el ambiente administrativo y nuevo no permiten suciedad alguna.
Pero pareciéndonos muy normal que la universidad se encuentre de esa forma, no nos damos cuenta de que hay personas detrás que trabajan dìa a dìa por hacernos sentir bien en el sitio de estudio. Estas personas se les conoce comúnmente como las de oficios varios.
A continuación se presentará una semblanza o perfil sobre una de ellas:
Martha Emilsen Jaramillo es una mujer de 38 años de edad, mide aproximadamente 1.73 centímetros de estatura, su contextura es delgada.
Su aspecto personal se podría definir con dos palabras: flaca y trigueña, se reconoce por ser la encargada de asear el piso 3 de la Funlam, en el bloque uno, ubicado en el lateral izquierdo de ésta.
Martha se define a sí misma como una persona tímida y frívola, al finalizar una charla que se tuvo en el área de trabajo ella no quería hablar y le preguntamos su razón y dijo “Yo soy asì, tímida”.
La mujer no es muy fluida para responder, siempre responde a todo con una respuesta negativa y positiva, esto da respuesta a su forma de ser; no le gusta interactuar con extraños, asì sean los que comparten con ella.
En la universidad la mujer no es muy conocida, pues lleva escasos cuarenta días de trabajar en la universidad. Martha dice, cuando se le pregunta como se siente en la Funlam, “me han tratado muy bien, estoy muy contenta”; ella es una mujer de pocas palabras.
Para hablar de esta mujer primer hay que saber que es de su vida pasada. Antes de entrar en la universidad, la mujer trabajaba en confecciones, pero debido a las bajas del dólar y a que el desempleo ha subido mucho, ella tuvo que cambiar de empleo.
Para quienes piensan que las aseadoras no estudian lo básico, esta mujer es un ejemplo de lo contrario. Emilsen terminó su bachillerato, y también un curso básico en sistemas, en la sede de Pedregal del (Servicio nacional de aprendizaje) Sena. Ella cuenta eso cuando se le pregunta de sus estudios.
Aparte de ser aseadora esta mujer también es madre, hermana e hija, asegura que tiene tres hermosos niños y cuatro hermanos. Cuando se le pregunta de cómo hace para mantener sus criaturas, ella asegura que al vivir con sus papás y sus hermanos, los gastos se reducen totalmente.
Reconocer a quienes permiten que nuestro entorno esté de la mejor forma, deberían ser personas importantes para nosotros. El hecho de preguntarles como amanecen, saludarlas en el ascensor y facilitarles el trabajo debería de ser el pan de cada día de todos los estudiantes de la universidad.
Pero pareciéndonos muy normal que la universidad se encuentre de esa forma, no nos damos cuenta de que hay personas detrás que trabajan dìa a dìa por hacernos sentir bien en el sitio de estudio. Estas personas se les conoce comúnmente como las de oficios varios.
A continuación se presentará una semblanza o perfil sobre una de ellas:
Martha Emilsen Jaramillo es una mujer de 38 años de edad, mide aproximadamente 1.73 centímetros de estatura, su contextura es delgada.
Su aspecto personal se podría definir con dos palabras: flaca y trigueña, se reconoce por ser la encargada de asear el piso 3 de la Funlam, en el bloque uno, ubicado en el lateral izquierdo de ésta.
Martha se define a sí misma como una persona tímida y frívola, al finalizar una charla que se tuvo en el área de trabajo ella no quería hablar y le preguntamos su razón y dijo “Yo soy asì, tímida”.
La mujer no es muy fluida para responder, siempre responde a todo con una respuesta negativa y positiva, esto da respuesta a su forma de ser; no le gusta interactuar con extraños, asì sean los que comparten con ella.
En la universidad la mujer no es muy conocida, pues lleva escasos cuarenta días de trabajar en la universidad. Martha dice, cuando se le pregunta como se siente en la Funlam, “me han tratado muy bien, estoy muy contenta”; ella es una mujer de pocas palabras.
Para hablar de esta mujer primer hay que saber que es de su vida pasada. Antes de entrar en la universidad, la mujer trabajaba en confecciones, pero debido a las bajas del dólar y a que el desempleo ha subido mucho, ella tuvo que cambiar de empleo.
Para quienes piensan que las aseadoras no estudian lo básico, esta mujer es un ejemplo de lo contrario. Emilsen terminó su bachillerato, y también un curso básico en sistemas, en la sede de Pedregal del (Servicio nacional de aprendizaje) Sena. Ella cuenta eso cuando se le pregunta de sus estudios.
Aparte de ser aseadora esta mujer también es madre, hermana e hija, asegura que tiene tres hermosos niños y cuatro hermanos. Cuando se le pregunta de cómo hace para mantener sus criaturas, ella asegura que al vivir con sus papás y sus hermanos, los gastos se reducen totalmente.
Reconocer a quienes permiten que nuestro entorno esté de la mejor forma, deberían ser personas importantes para nosotros. El hecho de preguntarles como amanecen, saludarlas en el ascensor y facilitarles el trabajo debería de ser el pan de cada día de todos los estudiantes de la universidad.
2 comentarios:
Buena introducción al perfil.
"En la universidad la mujer no es muy conocida, pues lleva escasos cuarenta días de trabajar en la universidad." no era necesario escribir de nuevo "universidad" con un "allí" habría bastado.
gracias profe lo tendré en cuenta para la próxima.
Publicar un comentario